Petit Choux, Petisús o Profiteroles

Siempre me ha encantado este dulce, relleno de chocolate, de crema de nata… desde que tengo uso de razón recuerdo su sabor en días especiales de santos familiares, alguna fiesta… Así que me puse a investigar si eran o no difíciles y maravillosa sorpresa, ¡están chupados! ¡Qué alegría! Ya vereis que buenos están.

Antes de hacerlos os contaré algo curioso acerca este postre: La pasta choux es una masa ligera típica de la cocina francesa con la que se elaboran unos pasteles llamados petit choux. Cuando estos pasteles se elaboran con la pasta choux en forma alargada, reciben el nombre de pepitos, relámpagos, petisús o susos, en función de la zona. Sin embargo, cuando se forman pequeñas bolas con la pasta choux, los pasteles se denominan petit choux, petisús o profiteroles. ¡Cuantos nombres, cuantas formas para una misma masa!

Antes de nada os aviso de que a mi me quedaron un poco grandes… ¡Es que no sabía que crecerían tanto!

Ingredientes para la pasta choux:

• 300 ml de agua fría
• 125 grs de mantequilla
• 150 grs de harina
• 1 pizca de sal
• 3 ó 4 huevos
• azúcar glaccé para espolvorear

Para la crema pastelera pincha aqui

Para la crema de chocolate:

• 75 gramos chocolates moreno
• la mitad de la receta de la crema pastelera

Empezamos haciendo la pasta choux. Deciros, por si no lo sabíais, que esta pasta es una masa ligera, crujiente y con aire. Se hincha en el horno debido a la cantidad de agua que se convierte en vapor mientras se están horneando, lo que hace que la masa doble en volumen.

Así que en primer lugar vertemos el agua en un cazo a fuego medio y añadimos la mantequilla. Cuando rompa a hervir, añadimos la harina y la sal y lo apartamos del fuego mientras lo mezclamos bien, así evitamos que la harina se nos queme. Debemos conseguir que la masa no se pegue. Dejamos reposar fuera del fuego unos 10 minutos.

Pasado este tiempo, añadimos uno a uno los huevos: echamos uno, revolvemos. Echamos otro, revolvemos. Así hasta acabar con los 4. Lo que debemos conseguir es una masa consistente pero no espesa. Tened cuidado y si los huevos que usais son muy grandes, con 3 os llegarán.

Acto seguido dejamos reposar 30 minutos.

Hay quien hace la forma de los Petit Choux con manga pastelera. La verdad, yo hice unos con manga y otros con la ayuda de una cuchara y quedaron exactamente iguales. Si os decantais por hecerlos con manga pastelera, podeis rellenarla ya antes de que pasen esos 30 minutos de reposo.

Pasado el tiempo, precalentamos el horno a 200° y ponemos en una bandeja de horno bolitas de masa dejamos un poco de separación entre ellas porque duplican y hasta triplican su tamaño.

Los horneamos durante 20 minutos a 200°, hasta que estén hinchadas y doraditas.

Retiramos del horno una vez hechas y las ponemos sobre una rejilla para que enfríen.

Una vez frías les hacemos un corte en el lateral para poder rellenarlas.

Mientras podemos ir haciendo la crema pastelera y el chocolate, o simplemente lo podeis tener ya hecho. La receta de la crema pastelera ya está colgada. Podeis verla aqui.

Para la crema de chocolate haremos lo siguiente. Para esta cantidad de Petit choux que salen, cogeremos la mitad de nuestra crema pastelera y la volcamos en un cazo a fuego lento y le añadimos unos 75 gramos de chocolate fundido. Removemos bien hasta que coja el color y ya la tenemos hecha.

Los rellenamos bien con manga pastelera o a mano con dos cucharillas. Metaltex tiene muchos tipos de mangas pasteleras, es más, podeis usar también la churrera para poder rellenarlos. Os quedarán perfectos.

Antes de servir, no os olvideis de espolvorear con azúcar glaccé y BIIIIIIIIIEEEEEEEENNNNNN, ¡A COMEEEEEERRRRR Y DISFRUTAAAAAAARRRRRRRRR!